Postre de crema de café con chantilly
Una opción dulce para aquellos a los que no les gusta el café amargo, pero están dispuestos a probarlo en alguna receta dulce. Pues con esta receta y Kolado caffé puedes hacer que todos conozcan el café de una forma diferente y se les despierte el gusto.
El café suele ser una bebida para tomar en condiciones de mucho estrés o como una actividad un tanto elegante, de ahí que haya tantos sitios para compartir una buena tasa de café, con experiencias de molido y tostado al instante, es todo un evento.
Si lo tuyo no es el café o quieres convencer a alguien de que el café es una bebida incondicional, te presentaremos un postre fácil con el que puedes sorprender a todos tus amigos en alguna reunión. Solo necesitas 350ml de crema de leche, 50ml de Kolado caffé, 50g de azúcar, 100g de queso crema, 1 lámina de gelatina, 20g de azúcar glass, esencia de vainilla al gusto, pepitas de chocolate o toppings de tu elección.
Es una receta tan fácil que puedes realizar en compañía de amigos. Es un plan ideal, ya que se realiza en tan solo 20 minutos, y aunque necesitan 4 horas de reposo puedes aprovecharlas jugando o hablando con tus amigos hasta que se complete el tiempo.
La receta consiste en remojar la gelatina en agua fría durante 10 minutos y mientras tanto vas preparando rápidamente tu Kolado caffé, al que le agregarás azúcar. Tan pronto la hoja de gelatina esté lista, debes escurrirla y disolverla en la taza de café. Para completar este proceso debes retirarla del café e incorporar en este el queso crema. Ahora solo debes batir hasta que tengas una mezcla homogénea.
El siguiente paso es agregarle 250m de crema de leche completamente fría a la mezcla que preparaste antes. Luego puedes servir cantidades exactas de la mezcla en cuatro vasos y ahora sí el tiempo de reposo que podrás aprovechar para disfrutar de algunos videojuegos en compañía de tus amigos.
Cuando se haya cumplido el tiempo puedes preparar la crema chantilly. Solo necesitas 100ml de crema de leche fría, azúcar glass y esencia de vainilla. Puedes ingeniarte una manga pastelera en caso de no tener. ¡Y ahora sí a servir! Solo queda el toque final: agregar los toppings que tus amigos prefieran.
